Comai: Halla en el cerro del tomoco apareció un espanto.
Vecina: no te lo creo comai
Comai: por maita que así fue, ¡me lo conto mi padrino!, que arrastraba las cadenas y a lo leeeeeejo se escuchaba un lameeeeeento.
Vecin
a: Eso es embuste, yo no creo eso
Hasta que una noche la vecina escucho unos ruidos de cadenas que se arrastraban por las calles del pueblo y se oían gritos. La vecina se asusto mucho
Vecina: aaaaaaay maaaaiita que será eso
Esa noche no podía dormir, temblando se tapo de pie a cabeza y se pregunta ¿no será el fantasma?
En efecto no era ningún fantasma era un perro que se le había escapado porque se le reventó la cadena y corrió por toda la calle, los grito que se oían eran de los dueños del perro que corrían detrás de él para atraparlo.
La vecina estaba tan asustada que creyó que era un espanto y salió por todo el pueblo gritando ¡es un espanto, es un espanto!
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